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El ABC publicaba el pasado viernes una noticia que nos dejaba un poco impactados, pues parece que a pesar de las caras consecuencias de conducir bajo influencias del alcohol y las drogas, todavía cuatro de cada diez conductores fallecidos en un accidente de tráfico habrían consumido alcohol, drogas o medicamentos.
Señalan que la droga más consumida en España es el cannabis y que hemos pasado de un consumo social a un consumo más compulsivo, comportamiento que afecta hasta el 35% de los jóvenes entre 20 y 30 años, y es precisamente en España donde el consumo adictivo de alcohol drogas se ha convertido en un problema alarmante, que afecta a los conductores que no pueden disociar el consumo de la conducción y que constituyen una parte importante de los reincidentes en infracciones y accidentes.
Parece que una de las causas de todo lo anterior es que la tolerancia a consumir y conducir es muy alta, especialmente en los jóvenes, donde dos de cada tres conductores reconocen haber viajado con un conductor bebido y uno de cada tres con uno que había consumido porros.
El artículo hace referencia a un interesante estudio realizado por la Dra. Nuria Guisández, investigadora y experta en alcohol, drogas y conducción de la Universidad Complutense de Madrid, en el que ha concluido que dentro de las tasas de alcohol permitidas se produce un aumento de la distancia de frenado y pérdida de agudeza visual, por lo que la Doctora subraya la necesidad de que se modifiquen los niveles de concentración de alcohol en aire espirado por debajo de 0,10 mg/l o de 0,2 g/l en sangre, haciendo hincapié en que la mejor propuesta estaría encaminada a implantar niveles de riesgo cero.
La verdad es que este artículo arroja unos datos escalofriantes de fallecidos por causa del consumo de drogas o alcohol, desde Abogacía de Accidentes os animamos a que dejéis el coche en casa si vais a consumir alcohol o cualquier sustancia que pueda influir en vuestra conducción. El primer motivo debería ser vuestra seguridad y la de las personas que os acompañan, pero si eso no fuera suficiente la gran cantidad de controles que se van a realizar son también un gran motivo. Las consecuencias que arrastra superar los límites legalmente establecidos, sobre todo los que pueden suponer un delito, son muy desgarradoras para la persona infractora pudiendo afectar muy seriamente a su vida laboral y familiar, cosa que conocemos de primera mano en nuestro despacho.
Os recomendamos la lectura completa del artículo al que podéis acceder a través del siguiente enlace:
Desde Abogacía os deseamos un buen comienzo de semana.
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La pasada semana en un artículo del confidencial, reflejaban la realidad con la que nos encontramos a diario en nuestro despacho. Las nuevas modificaciones legales han perjudicado mucho a los pequeños lesionados. Nos encontramos a menudo con lesionados a los que las compañías no quieren indemnizar porque la reparación del siniestro es de poca entidad, por lo que los ocupantes no pudieron resultar lesionados.
La mayoría de ellos con problemas de latigazo cervical, el gran olvidado en el nuevo baremo. A todo lo anterior, se le añade la reducción de la indemnización de los lesionados leves, y la obligación de acudir con prueba pericial de parte, pues recurrir al médico forense no es tarea fácil debido a la masificación del Imelga, con largas colas de espera para reconocimiento forense que demoran innecesariamente la resolución de las controversias suscitadas para determinar las indemnizaciones que deben ser percibidas por los lesionados.
Por nuestra parte, indicaros que lo mejor es solicitar asesoramiento a un profesional en cuanto tengáis un accidente, pues la mayoría lo hace sólo cuando la aseguradora le pone trabas para percibir una indemnización, de este modo se evitarán muchos problemas que puedan surgir después.
Cuando alguno de nuestros clientes, por desgracia, tiene otro accidente o alguno de sus conocidos, éstos acuden al despacho directamente para entregarnos la documentación y firmar una carta designando a un letrado del despacho, y lo que nos dicen es que así pueden estar tranquilos. Y es que el coste para ellos es cero, ya que en la mayoría de los siniestros, los honorarios del abogado que vosotros designéis los abonará vuestra aseguradora.
Bueno y después de este consejo os dejo el enlace a esta noticia tan interesante.